La polémica por el tercer puesto de la prueba de suelo de gimnasia artística en París 2024 se dio por finalizada con el despojo de la presea a la estadounidense Jordan Chiles -que dijo que le parecía “injusto”- y su envío a Ana Barbosu.
Que sí, que no, que sí. Uno de los capítulos más desprolijos de los Juegos Olímpicos París 2024 recién pudo cerrarse hoy, a 11 días de la controversia, con la devolución de la medalla de bronce de la prueba de suelo de gimnasia artística a la rumana Ana Barbosu. Ya con el evento cerrado, la atleta recibió la presea en una ceremonia en Bucarest.
La polémica había estallado cuando Barbosu quedó tercera y mientras celebraba el logro una revisión de los jueces determinó que la estadounidense Jordan Chiles quedara por encima. Sin embargo, desde el Comité Olímpico Rumano reclamaron la decisión y el Tribunal Arbitral del Deporte finalmente falló en su favor, por lo que Barbosu recuperó su puesto en el podio de la disciplina detrás de la brasileña Rebeca Andrade (ganó la medalla de oro) y la estadounidense Simone Biles (plata).
La fallida asignación de la medalla a la norteamericana había respondido a apelación de la entrenadora del equipo de Estados Unidos, Cecile Landi, pero luego el TAS determinó que se presentó cuatro segundos después del límite de un minuto, por lo que decidió en favor de la rumana.
De todas formas, la federación USA Gymnastics anticipó que continuará apelando en búsqueda de la medalla, cuya controversia afectó a ambas involucradas en una montaña rusa de emociones con el ciberacoso como aliciente, según denunció Chiles tras cerrar sus redes sociales: “No tengo palabras. Esta decisión me parece injusta y supone un duro golpe, no sólo para mí, sino para todos los que han defendido mi viaje. Para aumentar la angustia, los ataques espontáneos por motivos raciales en las redes sociales son incorrectos y extremadamente hirientes“.
La emoción de Barbosu en Bucarest
Al colgarse por primera vez la presea, la gimnasta de 18 años confesó: “No esperaba que la medalla fuera tan pesada, pero la usaría día y noche si es lo que se necesita para tenerla”, consignó la agencia AP. “Estoy muy feliz de tener esta medalla y espero representar a Rumania al más alto nivel y traer más medallas a casa”, agregó sobre el regreso de su país a un podio olímpico de gimnasia por primera vez tras Londres 2012.
Las carta de Jordan Chiles tras conocer que perdió su medalla
“Mientras celebraba mis logros olímpicos, escuché la devastadora noticia de que me habían quitado la medalla de bronce. Tenía confianza en el recurso interpuesto por USAG, quienes dieron pruebas concluyentes de que mi puntaje seguía todas las reglas. Este recurso no tuvo éxito.
No tengo palabras. Esta decisión me parece injusta y supone un duro golpe, no sólo para mí, sino para todos los que han defendido mi viaje. Para aumentar la angustia, los ataques espontáneos por motivos raciales en las redes sociales son incorrectos y extremadamente hirientes. He puesto mi corazón y mi alma en este deporte y estoy muy orgullosa de representar a mi cultura y mi país.
Nunca abandonaré mis valores de competir con integridad, luchar por la excelencia y defender los valores del espíritu deportivo y las reglas que dictan la justicia. Me enorgullezco de animar a todos, independientemente del equipo o país. Encontrar la alegría nuevamente ha sido un cambio cultural y me encanta ver a otros abrazarlo. Siento que les he dado a todos permiso para ser auténticos con quienes son”.
