Las declaraciones de la pareja de la Joya retumbaron fuerte en Córdoba, mientras el Xeneize se prepara para enfrentar a Vélez en la Copa Argentina. Sin embargo, creen que es poco probable que ocurra en el corto palzo.
“No quiero problemas familiares”,advirtió Oriana Sabatini, actriz, hincha de River y esposa de Paulo Dybala, antes de lanzar una melodía que endulzó los oídos de los fanáticos xeneizes: “Si su amigo (por Leandro Paredes) quiere que vaya a Boca, va a ir con su amigo”. A pesar de que el tema ya se había instalado en la agenda, sus declaraciones hicieron mucho ruido en las entrañas de Brandsen 805, aunque no lo ven muy viable en el corto plazo.
La piedra fundacional del asunto la puso el volante central surgido del cuadro de la Ribera, el día que dijo que tenía el deseo de retornar durante la gestión de Juan Román Riquelme como presidente y que quería hacerlo con su compañero de Roma y la Selección Argentina.
Los rumores se acrecentaron cuando la Joya, surgido de las Inferiores de Instituto de Córdoba, confesó que había “sentido la piel rara“ tras la ovación de los argentinos en el estadio Monumental ante Chile, con la 10 en la espalda. Los más atentos se dieron cuenta de que quizás, inconscientemente, había querido evitar el término “gallina” por su vínculación con River, el eterno rival. A su vez, apareció un video de archivo del torneo de la B Nacional 2011/12, en el que admitía simpatía la camiseta azul y oro.
La palabra de la sobrina de la exitosa tenista en un programa de streaming generó un importante revuelo en el hotel Holiday Inn de Córdoba, donde el plantel de Boca y los dirigentes están concentrados de cara a la semifinal de la Copa Argentina frente a Vélez, pautada para el miércoles en el estadio Mario Alberto Kempes. De todas formas, puertas adentro son conscientes de que, más allá del sueño que significaría tener dos campeones del mundo en plenitud, es muy difícil que se concrete en el corto plazo. Al menos, saben que no podrán llevarlo a cabo a principios del año que viene.
La situación de Paredes y Dybala en Roma
Semanas atrás, había corrido el rumor de que Paredes podía volver en enero al no gozar del rodaje esperado bajo el mandato de Ivan Juric. Sin embargo, en los días posteriores Roma lo despidió del cargo de entrenador y concretó la llegada de Claudio Ranieri, quien no demoró demasiado en ponerse en contacto con el volante -durante la doble fecha de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026- para comunicarle que lo tendría en cuenta y que quería que continuara en la Loba. Además, su contrato termina recién en junio del 2025, por lo que Boca deberá esperar unos meses más para charlar con el volante sobre su futuro.
Por su parte, el cordobés también finaliza su vínculo formal con Roma en junio de 2025. En el último mercado de pases, estuvo a punto de firmar en Al-Qadsiah, el equipo árabe donde juega Equi Fernández, que le ofrecía 80 millones de euros por cuatro años. No obstante, prefirió priorizar el factor deportivo y rechazó la propuesta para seguir en el club de la capital italiana. Aunque parece que su futuro estará en Europa por un tiempo más, desde Boca van a monitorear el panorama en 2025 para ver si hay argumentos para ilusionarse.
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