La Liga Profesional difundió el once del segundo semestre, con titulares y suplentes incluidos, y dejó una imagen llamativa: Gallardo no metió ningún jugador entre los mejores del torneo.
Tras el final del Torneo Clausura 2025 que conquistó Estudiantes, la Liga Profesional de Fútbol dio a conocer el equipo ideal del campeonato. La nómina reúne a los futbolistas más destacados del segundo semestre y dejó un dato que no pasó inadvertido: no aparece ningún jugador de River, a diferencia de Boca, que sí logró meter dos nombres.
El reconocimiento incluye un once titular y siete suplentes, con fuerte presencia del Pincha campeón, varios representantes de Racing y Rosario Central, y dos campeones del mundo entre los titulares: Ángel Di María y Leandro Paredes. La ausencia total del equipo de Marcelo Gallardo contrasta con la presencia del Xeneize y reabre el debate sobre el rendimiento del Millonario a lo largo del torneo.
La entidad de La Plata, además de quedarse con el título, logró colocar varios apellidos entre los mejores del Clausura, mientras que la Academia también tuvo una destacada representación pese a haber caído en la definición por penales. El Xeneize, por su parte, aportó jerarquía en puestos clave y Central dijo presente con nombres de peso ofensivo.
El once titular del Clausura quedó conformado por: Facundo Cambeces (Racing); Juan Pintado (Gimnasia), Santiago Núñez (Estudiantes), Ayrton Costa (Boca), Gabriel Rojas (Racing); Leandro Paredes (Boca), Santiago Sosa (Racing); Ángel Di María (Rosario Central), Alan Lescano (Argentinos Juniors), Edwuin Cetré (Estudiantes); Ronaldo Martínez (Platense).

Mientras que los suplentes elegidos fueron: Fernando Muslera (Estudiantes), Leandro Lozano (Argentinos Juniors), Santiago Ascacíbar (Estudiantes), Cristian Medina (Estudiantes), Franco Ibarra (Rosario Central), Marcelo Torres (Gimnasia) y Alejo Véliz (Rosario Central).
El equipo ideal del Clausura 2025 dejó premios para los protagonistas del semestre y, al mismo tiempo, expuso ausencias que no pasaron desapercibidas. En Núñez, el dato ya empieza a generar ruido.
