Pablo Cococcioni aseguró que el gobierno provincial reforzará la seguridad en la ciudad para evitar que la muerte a sangre fría del capo de la barra de Central “sea utilizado para instalar un regreso al pasado”.
El asesinato a sangre fría de Andrés Pillín Bracamonte, jefe de la barra brava de Central, generó una ola de temor generalizado en todo Rosario. A inicios de esta semana, el gobierno provincial puso en marcha un operativo contención para evitar otro lamentable hecho de este estilo y que no se convierta en el primero de una secuencia violenta.
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“Vamos a poner todo lo que esté al alcance desde la provincia, Nación y municipio para evitar que este hecho sea utilizado para instalar un regreso al pasado. Nos costó mucho salir de una dura situación con los dos años anteriores que cerraron con 300 homicidios dolosos, y vamos a cuidar al máximo lo logrado en estos once meses el trabajo conjunto para que puedan seguir viviendo tranquilos”, aseguró Pablo Cococcioni, ministro de Seguridad de Rosario.
Mientras se trabaja en “múltiples hipótesis” de la muerte del capo de Los Guerreros, detalló los pasos a seguir por parte de las autoridades: “Seguir reforzando la prevención en calle y evitar cualquier especulación de un rebrote de violencia que se ha dicho”. Y remarcó: “Este tipo de hechos producen conmoción y son disruptivos donde todo el mundo pregunta qué va a pasar”.
Fueron 15 balazos los que se escucharon durante la noche del sábado en las intersecciones de las calles Reconquista y Avellaneda, a unas cuadras del Gigante de Arroyito. Cinco de ellos impactaron en el cuerpo de Pillín Bracamonte y otros cinco en el de su mano derecha Daniel “Rana” Attardo. Los pormenores del episodio son cada vez más escabrosos y el gobierno sabe que no se puede quedar de brazos cruzados. “No hay que minimizar el hecho y sus implicancias, por eso se hizo un despliegue policial que está trabajando con el Plan Bandera y el comando unificado federal”, indicó Cococcioni en rueda de prensa.
Incluso, el mismo sábado por a la noche se formó una mesa específica de trabajo y el domingo temprano llegó el equipo de Seguridad de Nación con la secretaria del área, Alejandra Monteoliva, para trabajar de manera conjunta, coordinar el despliegue y reforzar las zonas en rojo. “Estamos garantizando la situación con los recursos que sean necesarios porque es importantísimo para la ciudad y para el país devolverle la tranquilidad a la ciudadanía”, expresó Monteoliva.