Con varios jugadores tocados y otros cansados después de levantar la Recopa, el DT apelaría a un once bastante alternativo para ir al Nuevo Gasómetro.
La alegría de la Recopa todavía perdura en la porción celeste y blanca de Avellaneda. Pero también es cierto que el calendario no da tregua y en las próximas horas Racing deberá cambiar el chip porque la pelota seguirá rodando. Y no será un partido más, sino un clásico: San Lorenzo, en el Nuevo Gasómetro, este lunes.
De a poco en el Predio Tita empiezan a dejar atrás la ´resaca´ de los festejos contra Botafogo en tierras cariocas y ya ponen el foco en lo que será el duelo interzonal por la fecha 8 del Torneo Apertura.
¿Qué planifica Gustavo Costas? Además de la lesión de Marco Di Cesare, varios jugadores quedaron tocados desde lo físico, algunos con molestias y otros con secuelas del cansancio, con lo cual todos los caminos conducen a que el entrenador meterá mucha mano en el equipo.
La defensa es la zona más debilitada de Racing, que también sufrió las bajas de Santiago Sosa (esguince en la rodilla derecha) y Agustín García Basso (fisura en el peroné de la pierna derecha). Ambos se siguen recuperando y llegarían en óptimas condiciones a visitar a Independiente, pero no este fin de semana.
Si bien habrá que esperar por la recuperación de los futbolistas hasta último momento, a esta hora la opción que corre con más fuerza es que Racing presente un once mayormente alternativo frente a San Lorenzo.
Sumado a Di Cesare, Luciano Vietto (venía de una molestia en un isquiotibial de la pierna izquierda), Bruno Zuculini (rodilla izquierda) y Gabriel Arias (aductor derecho) son algunos de los titulares que muy posiblemente mirarán las acciones desde la tribuna del Nuevo Gasómetro.
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Si bien el domingo la Academia compartirá el parte médico, ya es un hecho que el joven zaguero tiene comprometido el aductor de la pierna derecha y por eso pidió el cambio antes del cuarto de hora del complemento en Rio de Janeiro.
En las próximas horas se hará estudios para ver si es una distensión o un desgarro en la zona, pero Gustavo Costas ya sabe que, como mínimo, estará fuera de las canchas entre dos y tres semanas. Esta complicación física le impedirá jugar el próximo lunes contra San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro y lo pone en duda para el clásico de Avellaneda frente a Independiente, a disputarse el 16 de marzo, desde las 16, en el Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini.