De meteórico ascenso en la Primera División del fútbol argentino, el juez de 37 años tuvo un paso poco conocido como jugador de fútbol. Ya dirigió la final de la Copa de la Liga. Viene de una fuerte polémica en Estudiantes – Platense.
Nicolás Ramírez tendrá una de las jornadas más inolvidables de su carrera como árbitro el sábado 21 de septiembre. Luego de haberse perdido el anterior a causa de un desgarro, en el marco de los cuartos de final de la Copa de la Liga, el réferi de 37 años dirigirá el próximo Superclásico entre Boca y River en La Bombonera. Más allá de que tuvo una fuerte polémica en la última fecha durante el partido entre Estudiantes de La Plata y Platense, que despertó la furia de Juan Sebastián Verón, el juez está muy bien considerado en las entrañas de la Asociación del Fútbol Argentino y recibió la designación para el gran duelo del fin de semana.
Nacido en noviembre de 1986 en la localidad bonaerense de González Catán, Ramírez tenía el sueño de jugar al fútbol en la Primera División, pero eligió estudiar Educación Física en la Universidad Nacional de La Matanza, mientras realizaba el curso de arbitraje. Durante uno de los clásicos torneos universitarios, al entonces atacante le llegó la oportunidad de hacer una prueba en un equipo del corazón de la provincia de Buenos Aires, a unos pocos kilómetros de Carlos Casares.
“Una vez jugamos un amistoso contra la Cuarta de Boca y me vio una persona allegada a (Daniel) Tato Márquez.A la semana se contactaron conmigo del Club Agustín Alvarez (de 9 de Julio) y me ofrecieron hacer una prueba porque estaban buscando un centro delantero“, contó en una charla con el diario El 9 de Julio.
Luego de realizar una prueba, en la que convirtió un par de goles, decidieron apostar por él e incorporarlo a las filas del cuadro con 95 años de historia. “En cierto modo, fue una revancha para mí, que había estado distanciado del fútbol, por la desilusión de no haber llegado a la Primera División de AFA. Me permitió volver a tener ganas de jugar al fútbol y estar ligado a esta actividad que me encantó siempre desde chico”, añadió. Incluso, todavía se conservan en Internet fotos suyas con la camiseta roja, que vistió entre 2009 y 2011.
¿Cuándo abandonó los terrenos de Agustín Álvarez? En el momento que lo llamaron desde el ente regulador del fútbol nacional para que fuera árbitro afiliado. Si bien en los primeros meses volvía a la ciudad si tenía algún hueco de tiempo, luego tuvo que abocarse completamente al referato.
“Cuando empecé me vieron condiciones como para, en poco tiempo, empezar a dirigir en categorías superiores. En un momento tuve que tomar la decisión. Desde la Dirección Arbitral de AFA me dijeron que me dedicara de lleno a esto. Así comencé con fútbol infantil, inferiores y después con el ascenso en Zona Metropolitana”, reveló.
A partir de allí, su progreso fue raudo. Al cabo de seis años ya estaba debutando en la máxima categoría y había tenido algunas finales de ascenso sobre el lomo. Sin embargo, una lesión en el sóleo y otra en el nervio ciático le impideron transformarse en árbitro internacional hasta 2023, pese al deseo de Horacio Elizondo -primer argentino en dirigir una final de la Copa del Mundo- de que lo hiciera mucho tiempo antes.
Hasta ahora, su mayor desafío fue el mano a mano entre Estudiantes de La Plata y Vélez del pasado 5 de mayo en el estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero, que definió al Pincha como campeón del fútbol local. Ahora, el bonaerense tendrá que afrontar la difícil tarea de tomar el toro por las astas y llevar a buen puerto el Superclásico en Brandsen 805.
De todas formas, Ramírez no llega en su mejor momento luego de lo que fue su actuación en el encuentro entre el León y Platense. El juez anuló el gol de Luciano Lollo por una presunta infracción sobre Ignacio Schor que desató una explosión de bronca en el estadio UNO. Su decisión tampoco pasó desapercibida para el vicepresidente Juan Sebastián Verón, que estalló en sus redes sociales. “En vez de convocar a DT’s y capitanes (por la flamante “zona exclusiva” que dispuso la AFA), mejor revisen cómo dirigen y usan la tecnología, porque resulta muy obvio ya…”, tiró.
El entrenador Eduardo Domínguez salió con los tapones de punta y, en la misma sintonía, disparó: “Muchos goles nos anularon, son muchos puntos. Al cuarto árbitro le dije que es raro que un jugador quiera cometer falta cuando va en búsqueda de la pelota y el rival te quiere agarrar. ¿Cómo te lo sacas de encima si te agarra? Te lo tenes que sacar de encima, pero en vez de penal es foul en ofensiva, sucede mucho”.
La ternal arbitral para el Superclásico entre Boca y River
- Árbitro: Nicolás Ramírez
- Asistente 1: Maximiliano Del Yesso
- Asistente 2: Facundo Rodríguez
- Cuarto árbitro: Julio Barraza
- VAR: Héctor Paletta
- AVAR: Mariano De Almeida