Mauricio Serna, integrante del Consejo de Fútbol, y Nicolás Figal llevaron la voz cantante de la molestia que hay puertas adentro del Xeneize con algunas resoluciones del VAR y de los jueces en los últimos partidos.
La calentura en Boca por el empate 1-1 ante Deportivo Riestra aún permanece intacta pese a que pasaron varias horas del pitazo final de Yael Falcón Pérez. Más allá de que saben que el rendimiento de los jugadores fue bajo, y hasta repudiado por La Bombonera, también persiste un fuerte enojo contra determinadas situaciones de juego que consideran, en las entrañas del predio de Ezeiza, que deberían haber sido revisadas por el VAR.
Aunque Edinson Cavani había expresado después de la victoria ante Argentinos Juniors –en la que volvieron a anularle un gol a Milton Giménez por una mano– que no entendían el criterio que usaban los réferis en ese tipo de acciones, ahora fue Jorge Nicolás Figal quien llevó la batuta de los reclamos. “Después vimos la foto. Es una lástima. No quiero caer en el árbitro, pero hace rato que pasan cosas raras con nosotros. Como algunas veces te favorecen, otras te perjudican. Últimamente siento que pasan cosas raras contra nosotros. La imagen se ve por sí sola. El árbitro se puede equivocar”, disparó.
¿A qué jugada hacía referencia? Sobre el final del primer tiempo frente al Malevo de Pompeya, Nicolás Caro Torres agarró al Matador durante un córner y no lo soltó hasta que el peligro se disipó del área. Enfadado, el uruguayo abrió los brazos y protestó a viva voz, pero en las cabinas de Ezeiza prefirieron no llamar al juez de campo.
Como si fuera poco, hubo otra acción que despertó la bronca del estadio Alberto J. Armando. En el minuto final de juego, el zaguero con pasado en Independiente mandó un centro cuyo destino era la cabeza de Exequiel Zeballos. Sin embargo, Ignacio Arce, la figura del duelo, salió a cortar el envío e impactó contra la anatomía del Changuito. El problema fue que ninguno consiguió pegarle a la pelota. El reclamo de los jugadores de Boca fue inmediato, mas el árbitro decidió continuar el partido.
Al ser consultado sobre una supuesta actitud perjudicial del arbitraje hacia el club de la Ribera, Mauricio Serna, integrante del Consejo de Fútbol, esquivó la bala sin dejar de remarcar que es un tema de debate dentro de las paredes de Brandsen 805. “Eso lo estás diciendo vos. Para mí fue una jugada que por lo menos tendría que haber revisado. Hay un penal clarísimo a Cavani en el primer tiempo y otro a Zeballos en el segundo. A mí me preocupa todo“, declaró Chicho en el Show de Boca.
La furia interna en el Xeneize nació el día que a Giménez le anularon un gol en el último minuto ante el Millonario en el Superclásico por una mano de inmediatez, cuando una semana atrás no habían sancionado a Miguel Ángel Borja en una jugada similar contra Atlético Tucumán. En la derrota por 3-0 vs. Tigre en Victoria, que marcó el debut de Fernando Gago en el banco de suplentes, pidieron un toque en el brazo de Nicolás Paz en la previa del primer tanto, aunque el infractor había sido Ramón Arias. Con el tema de los arbitrajes, el horno pareciera no estar para bollos en Bradsen 805.