Amaya Valenzuela Ahumada, hija del vocalista de Lucybell – Claudio Valenzuela – se encuentra internada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Posta Central, luego que una otitis mal tratada le terminara provocando una infección en la sangre.
Su madre, Nicole Ahumada, explicó a LUN que “tuvo una otitis hace un par de semanas. Estaba supurando materia por los oídos y le dieron un antibiótico. Pero parece que fue muy poco y la infección se fue agrandando, agrandando y le dio una septicemia. Ahora están viendo qué bacteria fue”.
La otitis es una de las dolencias más comunes en verano, ya que en esta época de vacaciones los cambios de temperatura, el agua en los oídos el aire acondicionado y otros pueden dar lugar a la aparición de esta infección dolorosa y que requiere de tratamiento médico.
Según el Centro Auditivo GAES, la otitis es una inflamación del oído medio que se produce cuando se acumula líquido que debería drenarse. Esta acumulación se puede deber a las consecuencias de un simple resfriado, un catarro o una infección respiratoria.
Por lo general, produce un dolor intenso, lo que provoca molestia constante, irritabilidad, además de fiebre, supuraciones, dificultades para dormir o pérdidas auditivas momentáneas.
Cómo prevenir la otitis en verano
- No sumerjas prolongadamente tus oídos en la piscina: El dolor punzante en los oídos es conocido como la otitis del bañista. Esta infección se produce por la entrada de agua y humedad prolongada en el conducto auditivo externo. Para evitar cualquier molestia, lo mejor es mantener los oídos secos tras el baño. El fonoaudiólogo Luciano García aconseja secar el pabellón auditivo externo con toalla. Aunque, sin duda, afirma que lo más efectivo es la utilización de tapones que se adapten bien a los oídos y que eviten la entrada de agua.
- Cuidado con el calor: El uso del aire acondicionado también hace que se resientan nuestros oídos. Esto se debe a que estos aparatos reducen la humedad ambiental produciendo un ambiente artificial frío y seco, lo que afecta a las vías respiratorias. El experto asegura que los procesos irritativos o inflamatorios que se producen en las vías por permanecer en estos lugares, afectan también a los oídos.
- No permitas la deshidratación: Además de producir mareo o vértigo, también puede provocar acúfenos o pitidos en los oídos, sobre todo por la disminución del volumen de sangre en circulación y la tensión arterial baja. En este caso, hay que prestar una mayor atención a los niños y ancianos, más propensos a padecer estas situaciones, y aumentar la ingesta de líquidos en los días más calurosos.
- Si viajas en avión: Durante estos meses los viajes se disparan. Algunas personas son especialmente sensibles a los cambios de presión y, por ello, al viajar en avión y cambiar de altura se resienten sus oídos. Los cambios de presión pueden provocar molestias auditivas y llegar a ocasionar una pérdida de audición temporal.