El chileno Nicolás Zepeda será sometido a un tercer juicio por la muerte de su ex novia japonesa Narumi Kurosaki, de acuerdo a lo resuelto este miércoles por la Corte de Casación de Francia.
La decisión la adoptó el tribunal tras acoger el recurso de apelación que presentó en enero la defensa del ciudadano chileno, que había sido condenado a 28 años de cárcel por el crimen.
Con su determinación, la corte gala anuló la sentencia del juicio previo, que encontró a Zepeda culpable del asesinato de su ex pareja. Esto implicará que el nuevo proceso contará tanto con nuevos jueces, como un jurado integrado por otras personas que el anterior.
De igual manera, la resolución del tribunal estableció que el tercer juicio contra el chileno cambiará de jurisdicción, por lo que será visto por la Corte Penal de Rhônes, en la ciudad de Lyon.
Los juicios contra Nicolás Zepeda por el asesinato de Namuri Kurosaki
Nicolás Zepeda es acusado en Francia de asesinar a su ex novia Namuri Kurosaki y luego ocultar su cuerpo, tras encontrarse la noche del 4 al 5 de diciembre de 2016.
En el primer jucio, efectuado en abril de 2022, el ciudadano chileno fue encontrado culpable del crimen y se lo senteció a cumplir una pena de 28 años de cárcel.
Luego de una apelación de la defensa de Zepeda, los tribunales galos efectuaron un segundo juicio en el cual nuevamente se lo encontró culpable y se ratificó la pena de 28 años de prisión.
Luego de enterarse de la resolución del tribunal galo, el padre de Nicolás, Humberto Zepeda, aseguró que “hoy todo el mundo se entera de que efectivamente hubo dos juicios irregulares, que influyeron en la decisión del jurado para culpar y condenar a Nicolás” por el asesinato de Narumi.
“La Corte de Casación dictaminó que no hubo un juicio justo y se vulneraron derechos mínimos de defensa de Nicolás, desde el punto de vista del derecho, pero con consecuencias en la validez de las pruebas y la realidad de los hechos”, añadió.
Según Humberto Zepeda, “existen suficientes dudas razonables que están basadas en la razón y en el sentido común, para no considerar plausibles muchas de las débiles pruebas presentadas por el fiscal general”.
“Nunca existió la consideración de presunción de inocencia, principio fundamental en el derecho penal que tiene cualquier persona, que significa que no basta con que haya sospechas o indicios de participación, se requiere y se debe demostrar la culpabilidad más alla de toda duda razonable”, concluyó.
