El viernes 1 de marzo de 2024 encontraron el cuerpo del ex militar venezolano disidente. Estaba en una maleta, sepultado bajo cemento, en una fosa de 1,4 metros de profundidad al interior de una toma de terreno de Maipú. Vivía en Chile en calidad de refugiado y el Ministerio Público sostiene que el crimen tuvo motivaciones políticas y apunta directamente al régimen de Nicolás Maduro.
Ojeda fue secuestrado por falsos policías desde su departamento en Independencia el 21 de febrero de 2024 y su cuerpo fue encontrado nueve días más tarde, en una maleta cubierta por cemento, en una toma de Maipú.
El fiscal nacional, Ángel Valencia, señaló la mañana de este jueves en T13 Radio, que hasta ahora en la investigación del asesinato de Ronald Ojeda “hay antecedentes que permiten concluir que fue realizado por un encargo y que ese encargo habría venido de autoridades de la dictadura venezolana”.
En ese sentido, concluyó “el fiscal (Héctor) Barros me confirma que efectivamente hay tres personas que declaran en la investigación que atribuyen el encargo a autoridades del gobierno venezolano y a lo menos una de esas personas (…) manifestaría que el encargo y el pago habría venido del señor Diosdado Cabello”, segundo del régimen de Maduro.
Cabello se refirió al caso. “Venezuela no tiene nada que ver con ese secuestro, nada, arreglen sus problemas allá en Chile. Sigan dándole protección a mafiosos, que la propia mafia les cobra”, aseguró.
La investigación por el asesinato de Ojeda ha podido identificar, en total, a 16 personas que participaron en el crimen. ¿Por qué tanto interés en Ojeda? Lo cierto es que el estatus de refugiado político implica que el país que te acoge asume el deber de protegerte de la venganza del gobierno que te expulsó. Esto hace que este homicidio brutal, tenga un significado político contundente para nuestras instituciones.
Precisamente las declaraciones de más de un testigo, que apunten a la responsabilidad y entreguen antecedentes que den cuenta de la responsabilidad de autoridades venezolanas en el crimen de Ojeda.
Los allanamientos múltiples realizados la madrugada de este miércoles en Maipú, Estación Central y San Miguel implicaron un golpe a la célula del Tren de Aragua conocida como Los Piratas, ya que al menos dos de los seis detenidos en el operativo realizado por la Policía de Investigaciones (PDI) y Carabineros pertenecerían a esa facción de la banda criminal de origen venezolano.
Barros detalló que tienen individualizados a “16 partícipes” del crimen de Ojeda, entre ellos uno de los líderes de Los Piratas, apodado El Turco, detenido en Estados Unidos por tráfico de personas.
Coincidió que cuando Barros aclaraba la investigación, el recién asumido presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inició “el proceso de designar a los cárteles, incluido el peligroso Tren de Aragua, como organizaciones terroristas extranjeras y que le permitía utilizar la Ley de Enemigos Extranjeros para eliminarlos”.
En el documento se describe a estas organizaciones criminales son “una amenaza a la seguridad social que va más allá de la que plantea el crimen organizado tradicional” Y en Chile, lo estamos comprobando día a día.
El presidente del PC, Lautaro Carmona, criticó que el fiscal Barros sostuviera públicamente que el régimen de Maduro estuvo tras el secuestro y homicidio del oficial disidente, en vez de comprobar judicialmente sus dichos.
“Acá lo que hubo es una contratación del Tren de Aragua para efectos de secuestrar y asesinar finalmente a Ronald Ojeda”, agregó Barros. Hay pruebas contundentes de lo que nosotros estimamos que detrás de este hecho está el Gobierno venezolano.
En la investigación del fiscal, según se ha conocido, existe más de un testigo que señala que la orden para asesinar al ex militar venezolano, Ronald Ojeda, incluido un pago por el crimen, proviene del “número dos” de régimen de Maduro, el ministro del Interior, Diosdado Cabello.