Leda Bergonzi, la llamada Sanadora de Rosario, alcanzó notoriedad en su natal Argentina y que incluso la llevó a visitar nuestro país por sus supuestas “sanaciones”, reuniendo más de 6.000 personas en el Templo Votivo de Maipú.
La visita al templo ubicado en Maipú estuvo marcada por las personas que acamparon varias días para poder estar en contacto con la Sanadora de Rosario, situación que se replicó en el Santuario Gruta de Lourdes de Quinta Normal.
Sin embargo, Bergonzi no está pasando por un buen momento en su país, ya que una serie de polémicas, entre las que destacan acusaciones de estafa, hicieron que la Iglesia Católica decidiera expulsarla, consignó La Nación.
Esto, ya que si bien le entregó su apoyo cuando comenzó a conseguir popularidad, el vínculo se fue diluyendo, luego de los cuestionamientos por el manejo de las donaciones recibidas, lo que hizo que el Arzobispado de Rosario le prohibiera realizar la imposición de manos y de usar sus templos.
A pesar de esto, la Sanadora de Rosario se defendió y aseguró que podía realizar sus actividades en las iglesias de otras provincias.
Pero las acusaciones más graves las concretó su ex productor, Alberto Castillejo, quien recalcó que cometió una serie de estafas, mientras que la diputada Amalia Granata la denunció por recibir recursos de las autoridades provinciales para sus actividades.
Por su parte, la fundación Soplo de Dios Viviente, propiedad de Leda Bergonzi, está en la mira, ya que no está inscrita en la Inspección General de Justicia de Santa Fe, mientras que los millones que ha recaudado no habrían llegado a la organización, sino que se utilizaron en gastos personales, como la remodelación de su vivienda y la compra de una serie de vehículos.