Este viernes el Ministerio de Relaciones Exteriores dio a conocer por medio de un comunicado que Venezuela pidió el cese de sus funciones a los consulados de Chile, los cuales se encuentran ubicados en Caracas y Puerto Ordaz, como consecuencia de la suspensión de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Debido a lo anterior, dichos consulados tendrán que permanecer cerrados y sin atención al público a partir de esta jornada.
“El Gobierno de Chile lamenta esta situación, que afecta a miles de connacionales en Venezuela y ciudadanos venezolanos que requieran atención consular, e informa que está evaluando las diversas alternativas disponibles con el fin de garantizar el apoyo necesario para los connacionales residentes en dicho país”, manifestaron desde Cancillería.
Esta medida que adoptó el Gobierno de Nicolás Maduro se da a solo días de las declaraciones de la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien sostuvo que “en la práctica, hoy día no hay relaciones diplomáticas rotas. Ese acto diplomático, romper relaciones, no se ha producido”.
En esa línea, había agregado: “Pero están en su mínima expresión. Y eso hace que desde lo diplomático hasta lo consular está todo funcionando en sus mínimas capacidades y, por lo tanto, con un impacto enorme para la población”, lo cual ahora queda sin efecto tras la decisión de la Cancillería de Venezuela.
¿Qué implica que los consultados de Chile en Venezuela cesen sus funciones?
Este hecho concreta el rompimiento de las relaciones diplomáticas entre Chile y Venezuela, que según el canciller venezolano, Yván Gil, estaban rotas “desde agosto”. El Gobierno de Boric, en tanto, el pasado 7 de enero informó el término de la misión de su embajador ante Venezuela, Jaime Gazmuri.
Con esta medida, los chilenos que se encuentran en el país caribeño no podrán recibir atención ni realizar trámites en dichos consultados, tales como pedir la entrega de documentos de viaje provisorios que permitan regresar a nuestro país, o recibir asistencia o asesoramiento, como por ejemplo, contactar a sus familias en caso de accidente o en diferentes tipos de situaciones.
Serían cerca de 12 mil chilenos los afectados con esta determinación que tomó el régimen de Maduro.
Ante esto, desde el Ministerio de Relaciones Exteriores informaron que “están evaluando las diversas alternativas disponibles con el fin de garantizar el apoyo necesario para los connacionales residentes en dicho país”.
