Un inesperado vuelco tomó el caso de la desaparición de la dirigenta mapuche Julia Chuñil, cuyo paradero se desconoce desde el 8 de noviembre en la comuna de Máfil, en la Región de Los Ríos, gracias a una pista clave.
Según la querella presentada por la familia, el principal sospechoso es el empresario forestal y agrícola Juan Carlos Morstadt Anwandter, quien habría amenazado anteriormente a la mujer debido a terrenos del a Conadi que son resguardados por la comunidad Putregel.
Pero la investigación tomaría otro rumbo luego de las diligencias ejecutadas por Carabineros, ordenadas por la fiscal regional de Los Ríos, Tatiana Esquível, y el fiscal de focos investigativos, Carlos Bahamondes.
Según dio a conocer La Tercera, el pasado 30 de enero, personal de la Segunda Comisaría de Los Lagos llegó hasta la casa de la dirigenta para realizar pericias.
Ahí se logró dar con una pista clave: un rastro de sangre perteneciente a Julia Chuñil. Una muestra fue enviada al Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) en Santiago, el que, según informó Meganoticias, coincidía con el material genético de la mujer desaparecida hace casi cuatro meses.
Gracias a esto, se buscará poder volver a dicho domicilio para realizar una búsqueda con georadares de penetración en el suelo, para así comprobar si el cuerpo de la dirigenta está enterrado en el sector.
De esta manera, en la investigación tomaría fuerza la hipótesis de la presunta participación de uno de los hijos de Chuñil en el crimen. Fuentes cercanas a la indagatoria aseguran que para el Ministerio Público, el círculo familiar es “objeto de interés”.
Familia descarta participación en desaparición de Julia Chuñil tras pista clave
Tras la aparición de esta pista, desde la familia de Julia Chuñil descartan haber participado en su desaparición y acusan que la Fiscalía siempre los ha querido culpar de lo ocurrido. “Han allanado la casa de mi madre más de cinco veces”, aseguró Pablo San Martín Chuñil.
En cuanto al rastro de sangre planteó que puede tratarse de cualquier persona que entró a la casa de su madre, sobre todo tras su desaparición. “Tienen que comprobarlo cuando encontremos a mi mamá, no llegar y decir que esa muestra de sangre es de Julia Chuñil. No es así. Tú sabrás que en casa de campo de repente matan a un pollo o carnean un animal, como típica casa de campo“, sostuvo.
“Es muy sospechoso que afirmen eso, porque mientras no se encuentre el cuerpo de mi mamá no pueden decir que esa sangre es de Julia Chuñil”, añadió.