La presentación de Javier Aguirre y Rafael Márquez al frente de la Selección Mexicana no satisfizo a Christian Martinoli, quien lejos de dejarse llevar por el sólido 3-0 que obtuvo ante Nueva Zelanda, rememoró que ese tipo de escenarios son repetitivos.
Después de la gris Copa América que hizo el Tri y le costó el trabajo a Jaime Lozano, el Vasco comenzó su tercera gestión, aunque ante un rival que no supuso un riesgo real, lo cual le sirvió a Martinoli para lanzar una dura crítica.
“Esta historia la hemos visto 740 veces, México consigue rivales a modo para poder lucir luego de hecatombes dramáticas en torneos oficiales. Lo he dicho muchas veces: México es campeón del mundo en partidos amistosos, conseguimos unas rachas que te mueres, que espantan, pero cuando las cosas se ponen serias ahí cuesta mucho trabajo, sobre todo con equipos top, cuando el juego se acelera”, dijo en su editorial tras el juego.
No obstante, en esta ocasión no todo fueron críticas, sino que también destacó algunas participaciones, como fueron las de Orbelín Pineda y César Huerta, dos jugadores que revolucionaron al representativo.
Por el mismo tenor fueron Zague y Luis García, quienes destacaron a ambos jugadores, además de Julián Quiñones y Santiago Giménez, esta vez muy participativos.
Un castigo justo
Respecto a la pobre entrada en el Rose Bowl que apenas alcanzó los 25 mil 271 aficionados, el Doctor García comentó que es un castigo merecido para una Selección que les ha quedado a deber.
“Me parece hasta bueno. Hoy se manifestó diciendo ‘no estoy tan contento con lo que me ha regalado en las últimas fechas'”.
