El cubano William Scull se convirtió en nuevo campeón del mundo de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) del peso supermediano al derrotar por decisión unánime al ruso Vladimir Shishkin (tarjetas de 116-113, 116-112 y 115-113), en un encuentro con polémica.
Se trata del título que le fue arrebatado a Saúl “Canelo” Álvarez a finales de julio, uno que el mexicano no se ha mostrado interesado en recuperarlo, al menos a la brevedad, una decisión que puede ser la mejor, ya que Scull demostró que está muy lejos en cuanto a su nivel.
¿Por qué le quitaron el título al Canelo Álvarez?
Después de que Canelo Álvarez venciera a Jaime Munguía en mayo pasado, la FIB anunció la pelea mandatoria ante el propio Scull, pero el mexicano no se mostró interesado en la pelea y decidió no ir adelante en las negociaciones.
Contrario a lo que sucede con el CMB, que nunca le retiró el campeonato de las 168 libras a pesar de que no lo quiso defender ante el mandatorio David Benavidez, la FIB dio un paso al frente y lo despojó del campeonato.
Scull sólo así pudo buscar el cinto y no lo desaprovechó, ya que fue capaz de convencer a los jueces en su enfrentamiento ante Shishkin, una auténtica roca inamovible.
Le costó a Scull
No fue una exhibición portentosa la del nuevo monarca, ya quese vio una paridad en calidad entre ambos, lo que llevó a que hubiera molestia entre los asistentes en el Stadthalle de Falkensee de las cercanías de Berlín.
Quedó claro también que ninguno de los dos tiene para amenazar la superioridad de Canelo Álvarez, quien habría tenido un día de campo de haber enfrentado a cualquiera, aunque ya el cubano había adelantado su deseo de enfrentarlo.
