¡Partidazo! El Clásico Regio 139 se vistió de azul y blanco, Rayados lo ganó 4-2 ante Tigres y llega a cinco ediciones sin perder, con tres triunfos y dos empates, pero lo más interesante en este duelo de la Jornada 12 del Apertura 2024, es que un joven canterano de 19 años fue el héroe, se trata de Íker Fimbres, quien inició el partido con apenas 156 minutos en la Primera División.
Apenas era su octavo partido en el Máximo Circuito, el segundo como titular y fue el jugador que marcó la diferencia, abrió el marcador y puso el último clavo al ataúd con el 4-2 definitivo, un golazo que sepultó a los felinos, haciendo recordar lo que Francisco Acuña hizo para los felinos en el Clásico Regio 87 en el Apertura 2008, aunque el nombrado Messi entró de cambio, jugó 16 minutos, provocó una expulsión, tres goles y anotó uno más, para el 4-1 en ese encuentro.
En ese entonces, Acuña tenía 20 años, uno más que Fimbres; curiosamente, ambos son nacidos en Hermosillo, Sonora. Íker salió del partido al 79′, ovacionado por la afición de Rayados, quien coreó su nombre y reconoció lo hecho por este joven, quien celebró con su técnico Martín Demichelis.
Guido Pizarro le estorba a Nahuel Guzmán y es gol de Rayados
Rayados pudo abrir el marcador al minuto 5 del partido, en una jugada extraña, en el que Germán Berterame disparó a portería, pero el esférico se estrelló en el travesaño; Nahuel no estaba en posición y el rebote le cayó a Íker Fimbres, quien remató potente raso al centro del arco, exactamente a donde se ubicaba Guido Pizarro.
Sin embargo, el Conde al querer desviar y evitar el daño, no lo hizo bien y mandó la pelota a su propia portería; además, en la imagen se aprecia que el Patón Guzmán ya había regresado, y de no haber estado Guido parado en ese espacio, el portero felino habría podido despejar, pero su compañero le estorbó y la jugada terminó siendo el 1-0 para la Pandilla.
El Monterrey creaba más peligro, al 14′ por poco y hace el segundo, cuando por izquierda desbordó Lucas Ocampos y envió un centro en el que Berterame no logró llegar a tiempo a cerrar la pinza y el balón sólo se paseó por enfrente de la portería.
Por los auriazules no había una jugada clara en los primeros minutos, aunque se presentó un empujón claro dentro del área de Óliver Torres sobre Joaquim Pereira, pero no se marcó nada.
¡Golazo de Canales!
Mientras, el local dominaba el partido y en tres cuartos de cancha, pegado a la banda derecha, Joaquim Pereira cometió una falta sobre Lucas Ocampos.
Desde ahí cobró Sergio Canales, directo a portería, cruzó su disparo a segundo poste, al ángulo superior; Nahuel Guzmán voló, pero fue imposible llegar a ese balón.
¿Penal?
Al 29 de acción, el BBVA ya era una locura, pues el árbitro Óscar Mejía marcó penal a favor de Rayados, cuando Lucas Ocampos cayó al césped en un choque con el Patón, quien salió por el esférico, pero antes el jugador del Monterrey tocó la pelota.
Sin embargo, había duda, no era muy clara la falta y había posibilidad de que se anulara esa marcación, pero después de cinco minutos, el silbante ratificó lo dicho y Ocampos se encargó de cobrar al costado derecho de Nahuel, mientras que el Patón se venció al otro lado y así ya ganaba la Pandilla 3-0 al 35′ de acción.
Goles que revivieron a Tigres
No se veía por dónde iba a reaccionar Tigres, cuando Guido Pizarro se encontró un balón en el área chica y lo convirtió en gol; Juan Brunetta había enviado un centro desde la banda derecha, el esférico pasó por enfrente de todos y fue hasta que llegó a segundo palo, donde el Conde empujó para poner el partido 3-1, aún a favor de los locales al 44′.
En el tiempo agregado, el árbitro fue al VAR, ya que le notificaron que había una mano de Fidel Ambriz dentro del área, en un tiro de Fernando Gorriarán; se analizó y se confirmó que era un penal a favor de Tigres. André-Pierre Gignac fue el encargado de cobrar, disparó raso al costado derecho de Estaban Andrada, quien estuvo a nada de atajar, pero no tuvo la fuerza suficiente para desviarlo fuera del arco y así cayó el 3-2 al 45′ + 8′.
Tigres cambia la cara
En el arranque del segundo tiempo, ambos equipos eran ofensivos y Tigres no era el mismo de la primera parte, ahora se iba al frente con mayor profundidad y claridad, aunque con falta de contundencia, pues estuvieron sólo cerca de empatar en los primeros minutos.
Ozziel Herrera por poco hace la hazaña, se quitó a sus marcadores y pudo sacar el disparo, pero Andrada estuvo atento para quedarse con el balón, que parecía lo iba a sorprender. También Canales tuvo lo suyo, un disparo que pasó apenas por encima del arco y Ocampos, que frente a Nahuel, le dejó un disparo suave a las manos, que el argentino pudo atajar.
Un silencio y suspiro se escuchó en el Gigante de Acero, cuando el balón le cayó a Diego Lainez y disparó cruzado, el esférico pintaba para ser gol, pero Andrada voló a su costado izquierdo y salvó a su equipo; lo mismo ocurrió en el 57′, cuando Gorriarán disparó desde linderos, pero el arquero albiazul estaba bien colocado.
Íker Fimbres hace el doblete y despierta al Gigante de Acero
Íker Fimbres, quien había marcado el 1-0, convirtió su doblete en el partido al 66′, cuando tomó el esférico en tres cuartos de cancha y sin nadie cerca que lo marcara, prendió el balón directo al ángulo, Nahuel voló al verse sorprendido, pero fue inevitable ese golazo del canterano albiazul.
Ya en los instantes finales, en el 87′ de acción, Brandon Vázquez tenía el quinto tanto, sólo era de empujar, pero la falló; para su fortuna, se marcó fuera de lugar, pero el ‘oso’ nadie se lo borra.
Tigres no bajaba los brazos, continuaba yendo al frente; incluso, Gignac tuvo un disparo que lucía para irse a las redes, pero su propio compañero Juan Pablo Vigón estorbó, y prácticamente actuó como defensa del rival. Los felinos no dejaron de insistir hasta el último momento, pero ya la remontada no fue posible.
Con este resultado, Rayados empató a Tigres con 24 unidades en la tabla general, pero los felinos son terceros por mejor diferencia de goles y aún tienen un partido pendiente.