Freddie Freeman y su padre encontraron un refugio en el beisbol cuando su madre murió cuando el hoy pelotero de los Dodgers apenas tenía 10 años de edad. Ahora, 25 años más tarde, Freddie cumplió un sueño de niño y le dedicó a su papá el grand slam con el que Los Ángeles le dio la vuelta de forma dramática al Juego 1 para dejar en el terreno a los Yankees en Dodger Stadium.
Con una base por bolas intencional a Mookie Betts, los Yankees prefirieron enfrentar a Freeman que esta postemporada ha sido marcado por un esguince de primer grado en el tobillo derecho. Pensando que había más probabilidades de dominarlo para conseguir la victoria, Nestor Cortés y Nueva York fueron sorprendidos cuando al primer lanzamiento Freddie puso la esférica a volar hacia el jardín derecho.
“Me ha ayudado con mis prácticas de bateo desde que tengo memoria. Mi swing es gracias a él. Mi enfoque es gracias a él. Soy quien soy gracias a él”, dijo Freeman. “Así que todas las prácticas de bateo, todas las incansables horas que pasamos juntos en un campo de béisbol, todavía las hacemos juntos fuera de temporada”.
La madre de Freddie falleció en 1999 a causa del cáncer de piel, razón por la cual Freeman usa una playera de manga larga y usa el número 5 en su uniforme, el mismo que tenía en las Ligas Infantiles cuando ella feneció.
Tras dar vuelta por todas las bases, Freddie fue corriendo a ver a su papá que estaba en la primera fila del Dodger Stadium festejando la victoria del equipo de su hijo.
“Solo quería compartir ese momento con él porque él ha estado ahí. Él también ha pasado por muchas cosas en su vida, y solo por tener un momento como ese, solo quería ser parte de eso con él en ese momento. Ese es principalmente su momento porque si no me hubiera ayudado con mis prácticas de bateo, si no amara el béisbol como lo hace, yo no estaría aquí jugando este juego. Así que ese es el momento de Fred Freeman”.
Los Freeman ya tienen un anillo de Serie Mundial pues Freddie fue parte de los Braves que lo conquistaron todo durante la temporada de 2021. De hecho, Freddie fue protagonista capturando en primera base la pelota que terminó el juego. Sin embargo, lo de esta ocasión con los Dodgers es aún más especial para él pues incluso es algo con lo que había soñado como lo hacen miles de niños que practican beisbol.
“Ese tipo de cosas son las que te imaginas cuando tienes 5 años con tus dos hermanos mayores y estás jugando en el patio trasero: dos outs, bases llenas en un juego de la Serie Mundial”, agregó Freddie. “Solo estaba flotando”.
