Para el padre de James Rodríguez, su hijo ha triunfado en el mundo del futbol en una posición tan complicada que exige calidad técnica, visión de juego, gran calidad de golpeo, también mucha mentalidad y disciplina.
Si bien es cierto que no estuvo tan cercano a él luego de separarse de la madre del futbolista, cuando James tenía apenas tres años, no le impidió estar pendiente de su evolución de juego y crecimiento profesional y personal.
Wilson James Rodríguez, papá fue futbolista, fue mediocampista, con buena calidad pero lejano de lo que su hijo ha logrado alcanzar, el mismo lo asegura.
Señor James, gracias por su tiempo, por recibirnos en la casa del Futbol Club de Envigado, donde el apellido James es parte de la herencia del futbol de Envigado para Colombia. Gracias.
“Muy amable a ustedes también y bienvenidos. Y un gusto que estén aquí en el Polideportivo de Envigado, sede del club Envigado Futbol Club”.
Don James, ¿Qué se siente tener ya la playera de su nuevo equipo, el 10, ahora con el equipo de León?
“Yo lo felicité porque es una ciudad (León,) que tiene mucho futbol competitivo y la verdad que me alegra, me alegra porque para que tenga continuidad”.
¿Quién es James Rodríguez? ¿Quién es su hijo? Platícanos.
“James Rodríguez, una persona humilde, sencilla, trabajadora como todos los profesionales, pero muy bien. Es una excelente persona”.
¿Cómo comienza el sueño? ¿Dónde se da cuenta James que quiere ser futbolista? ¿Y en qué momento se da cuenta de que quiere ser, no un futbolista, sino el futbolista?
“Yo creo que en el futbol eso nace con uno. Cuando uno ve a los niños gateando, cuando ven empezando, ya empiezan a crecer y empezando, con eso nace con uno, pero yo no pensé que iba a ser un muchacho así tan grande, tan a nivel. Son cosas de la vida”.
¿A qué jugaba James? ¿Con quién soñaba ser James?
“No, no, no. Él era, siempre, siempre cuando estaba peladito, era muy hincha del Real Madrid. Y mire, eso se le cumplió. Y ahí está”
¿Cómo era el día a día de James fuera de la cancha, en su casa, en el colegio?
Que nos pueda platicar un poco de cómo era el día a día de James, sí del futbolista, pero del niño. ¿Cómo fue la infancia?
“No, pues yo con James viví cierto tiempo, me separé de la mamá. Era niño orgulloso, niño deportivo”.
¿Qué es lo que más cree que le gusta a su hijo y qué es lo que cree que le causa tristeza?
“Yo creo que lo que más le gusta a él es ganar, y piedra y tristeza, como decimos aquí, piedra, tristeza, perder. No le gusta perder, porque todos tenemos que ser ganadores”.
Si tuviera que quedarse con una característica, una cualidad de su hijo, ¿cuál sería?
“La mentalidad. Esa mentalidad positiva que tiene cuando juega con la selección, cuando juega en los equipos, que yo creo que él hace las cosas profesionalmente muy bien. Es una persona muy estructurada, muy disciplinada”.
Que James sea un ícono, que sea un ejemplo a seguir, es una responsabilidad muy grande. ¿Cómo se siente usted que es su padre con respecto a que James es un ícono en Colombia?
“Bueno, es un orgullo, un orgullo muy grande, porque van a pasar tiempos para que vuelvan a tener a uno como James. James Rodríguez, mi hijo. Yo también jugué futbol, pero él marcar diferencia. Yo creo que, imposible de igualar”.
¿Qué es lo que hace diferente a James Rodríguez?
Usted lo conoce, es su esencia. Usted lo conoce en los momentos altos, en los momentos bajos, cuando ha llorado, cuando ha reído ¿Qué es lo que hace diferente a su hijo?
“Yo creo que lo que hace diferente a mi hijo es la disciplina. Él es muy disciplinado. Él cuando llega de vacaciones no se queda quieto. Es una persona muy disciplinada, eso es lo que le marca diferencia”.
Si usted pudiera en este momento platicar con él, ¿qué le diría?
“No, yo todos los días hablo con él, chateamos, yo siempre lo felicito. Y si le va mal, también le digo. Yo le digo las cosas también, porque para eso uno también jugó, entonces le hablo también sobre las cosas”.
¿Usted vio el video con el que lo presentaron?
“No, no vi el video, pero sí vi el partido”.
¿Y qué le pareció el debut de su hijo?
“Muy bien, lo felicité. Esos son jugadores que marcan diferencia. Entró y cambió el equipo. Hizo diferencia. Sí, señor”.
“Es la gran esperanza de Colombia para las eliminatorias, para el Mundial. Siempre lo ha sido, siempre lo ha sido, y es un líder bueno, un líder positivo”.
No debe ser sencillo cargar siempre con la responsabilidad, ¿no? Digo, le gusta jugar, marca diferencia, pero siempre saber que él es el obligado, porque así lo ve la afición, entendiendo que es un deporte colectivo, pero que la afición lo vea. Debe ser complicado. ¿Cómo lidia su hijo con esa presión de ser él el diferenciador?
“No, ¿por qué? Porque no es que marque diferencia, sino la humildad. Él es muy humilde y esa humildad se la genera a los muchachos, a los que van subiendo, porque esa unión tan verdadera que tienen, perdone que diga así, esa unión que tienen, por ello es que Colombia está yendo bien”.
La afición en León está volcada a comprar los abonos, se agotaron casi los abonos en el estadio. ¿Qué le dice a la afición de León que recibe hoy a su hijo y que ve en él muchas esperanzas de que el equipo juegue mejor y de que pelee por cosas?
“No, no, yo creo que tiene un equipo, hay equipo, tiene buenos jugadores y con James, pues yo creo que se van a hacer mejores cosas”.
¿Va a ir pronto a León?
“Si Dios quiere, vamos a ver, que Dios me invite”.
¿Juega el próximo lunes en el Estadio León, en casa, debuta en casa?
“Si Dios quiere, hay que mirarlo también. Perfecto”.
¿Algún mensaje que le quiera mandar a la afición de León?
“No, no, un abrazo para todos y gracias por recibir al hijo, a mi hijo y que no le va a caer mal”.