La relación comercial entre México y Estados Unidos ha estado marcada por altibajos a lo largo de las últimas décadas. Sin embargo, las políticas comerciales impulsadas por la administración de Donald Trump, específicamente los aranceles impuestos a productos mexicanos, tendrán repercusiones significativas.
En 2025, con nuevos aranceles impuestos, los efectos de estas medidas continúan alterando los equilibrios económicos entre ambos países.
Contexto Histórico de los Aranceles de Trump
El presidente Donald Trump implementó una serie de medidas comerciales que incluyeron la imposición de aranceles a una variedad de productos importados, entre los que destacan el acero y el aluminio, así como productos agrícolas y automotrices provenientes de México. Estas medidas formaban parte de su estrategia para reducir el déficit comercial de Estados Unidos.
Los aranceles más destacados fueron:
- Arancel del 25% sobre el acero y 10% sobre el aluminio mexicano.
- Aranceles adicionales a productos agrícolas como frutas y verduras, que impactaron gravemente a los productores mexicanos.
- Tarifas a vehículos y autopartes mexicanos, uno de los sectores más importantes de la economía del país.
A pesar de que en 2020 se firmó el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que reemplazó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), algunos de estos aranceles permanecieron vigentes, lo que generó incertidumbre en los mercados y afectó la competitividad de las industrias mexicanas.
Sectores Más Afectados por los Aranceles
Sector Automotriz
México es uno de los mayores productores de vehículos en América del Norte, y el sector automotriz es crucial para su economía. Sin embargo, los aranceles impuestos a las autopartes y vehículos fabricados en México han afectado la competitividad de las empresas mexicanas en el mercado estadounidense. Muchas compañías tuvieron que absorber los costos adicionales provocados por los aranceles, lo que resultó en un aumento de los precios de los vehículos exportados a EE. UU.
Sector Agrícola
Otro sector particularmente vulnerable ha sido el agrícola, especialmente en lo que respecta a productos como tomates, pepinos, berries y aguacates. Las tarifas impuestas a estos productos en respuesta a las políticas de Trump aumentaron el costo de exportación, afectando la rentabilidad de los productores mexicanos y limitando su acceso al mercado estadounidense.
Industria del Acero y Aluminio
México es un importante exportador de acero y aluminio, y los aranceles impuestos a estos metales han incrementado los costos para las empresas mexicanas que dependen de estos materiales para sus procesos de manufactura. La industria del acero, en particular, se ha visto afectada, ya que muchas de sus exportaciones hacia EE. UU. ahora enfrentan barreras arancelarias que las hacen menos competitivas frente a las de otros países.
Respuestas y Estrategias del Gobierno Mexicano
Desde la imposición de los aranceles, el gobierno mexicano ha tomado diversas medidas para contrarrestar el impacto económico. Se mantiene la búsqueda de acuerdos multilaterales y la diversificación de mercados comerciales.
1.- El T-MEC y sus Implicaciones
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ha sido una herramienta clave para mitigar algunos de los efectos de los aranceles. Aunque el tratado incluye disposiciones que obligan a Estados Unidos a eliminar algunas de las tarifas, otros aranceles, especialmente los relacionados con el acero y el aluminio, siguen vigentes. A pesar de estas restricciones, México ha logrado mantener el flujo comercial con EE. UU. relativamente estable gracias a los mecanismos de resolución de disputas incluidos en el T-MEC.
2.- Diversificación de Mercados
Una de las respuestas más importantes de México ha sido la diversificación de sus mercados de exportación. México ha incrementado sus relaciones comerciales con países de Asia, Europa y América Latina. Iniciativas como el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (CPTPP) han ayudado a abrir nuevas puertas para los productos mexicanos, pero la integración económica con EE. UU. sigue siendo la columna vertebral del comercio exterior de México.
3.- Apoyo a las PyMEs
El gobierno también ha implementado programas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) que se han visto afectadas por los aranceles, proporcionando incentivos fiscales, créditos y asistencia técnica para ayudarles a mejorar su competitividad. Sin embargo, la falta de infraestructura adecuada y la resistencia al cambio tecnológico siguen siendo barreras para muchas de estas empresas.
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Perspectivas a Futuro: Un Camino Incierto
En 2025, la relación comercial entre México y Estados Unidos sigue siendo compleja y sujeta a incertidumbre. Los aranceles continúan siendo un factor disruptivo para la economía mexicana.
A pesar de que las políticas arancelarias de Trump han dejado una huella profunda en la economía mexicana, el país ha demostrado una notable capacidad de adaptación. Sin embargo, los aranceles siguen siendo un desafío importante para sectores clave como el automotriz, el agrícola y el metalúrgico. En 2025, la incertidumbre persiste, y la clave para el futuro económico de México radicará en su capacidad para adaptarse a un entorno comercial en constante cambio y en sus esfuerzos para diversificar sus mercados y fortalecer su competitividad.