La ciudad de Guadalajara se pintó de negro y plata con la presencia de Alexander Mattinson y las Raiderettes en una plaza comercial, donde convivieron con aficionados de Las Vegas Raiders.
En punto de las cuatro de la tarde, porristas y jugador subieron a la tarima aclamados por los cánticos de cientos de ‘Los malosos’ que se dieron cita en espera de conseguir el autógrafo de su ídolo y la fotografía del recuerdo con las carismáticas porristas.
El staff que acompañó de cerca al equipo no dejó de manifestar su sorpresa ante la multitud que se reunió en torneo a ellos, no faltaron los que presumieron su colección de merch de su equipo, los que viajaron desde estados vecinos y por supuesto las nuevas generaciones.
El estilo chicano fue uno de los más vestidos, con las jerseys en tallas extras, los pantalones holgados, algunas cabezas rapadas, tatto’s y por supuesto, las cadenas grandes con la placa de su equipo al estilo graffiti; lucieron entre los aficionados y llenaron de vida la atmósfera.
‘Los malosos’ hicieron honor al sobrenombre con botargas de osos malvados y ángeles negros con collares y bastón de cabezas con ojos rojos como salidos del inframundo.
Todo como parte de una imagen colectiva que pretende transmitir ese impacto al desempeño que sus jugadores muestran durante el juego.
Para cerrar con broche de oro, Mattinson y las Raiderettes, inmortalizaron el momento con la fotografía del recuerdo junto a todos los miembros de la Raider Nation en Guadalajara.